domingo, 28 de septiembre de 2008

El principal motor del cambio: la familia


María del Rocío Rivera Ramírez
lunes, 22 de septiembre de 2008

Te levantas una mañana, lees los titulares de los periódicos en los que se publica la barbarie en la que vive nuestra sociedad: asesinatos, secuestros, robos, conflictos políticos. Hablas con tus amigos y conocidos. Cada uno comenta sus propias preocupaciones acerca del tema. Incluso llegas a cuestionarte si habrá alguna solución a ellos.
Tienes la esperanza de que los gobernantes pongan cartas en el asunto y cambie la situación. Miras la realidad en la que vives y surge la pregunta: ¿Puedo hacer algo para cambiar la realidad de mi sociedad?
Formar familias sólidas es una urgencia hoy por hoy, aquellas en las que la comunicación sea la característica fundamental; en donde se vivan los valores de la honestidad, el respeto, la generosidad, el amor, la comprensión, el esfuerzo, el sentido de equipo, la fe, la gratitud, la paciencia, entre otros.
Pero hablar de familia nos obliga a pensar en el tema de matrimonio porque ella nace de ese vínculo. Por eso, la vivencia de dichos valores en la pareja resulta indispensable para la formación de una familia sólida.
El gran reto resulta en llevarlos a la práctica en el vivir diario: ante las diferencias en formas de pensar entre hombre y mujer, la rutina en la relación, las presiones laborales, carencias económicas, la enfermedad en algún miembro de la familia. Toda pareja tiene momentos de crisis. La clave es permanecer unidos, en diálogo y apertura.
La psicóloga Claudia Tarasco menciona la importancia de recordar en los momentos de dificultad cuáles fueron las razones por las que se eligió a esa pareja, ya que en ocasiones es más común mirar los defectos que las cualidades.
Asimismo, menciona que la solución a las dificultades en las relaciones de pareja no depende del seguimiento de una serie de pasos como en las recetas de cocina, sino que cada situación particular tiene una solución particular. Ante esto, la ayuda de profesionales en consejería matrimonial puede ser muy útil.
Cuánto se necesita de seres humanos íntegros, profesionistas responsables y honestos, gente trabajadora, estudiantes esforzados que en el futuro se desempeñen en cualquier rubro de la actividad económica y social de manera ejemplar.
Qué importante es tener criterios claros, transmitirlos sólida, nítidamente a los hijos para que, a pesar de los vientos y presiones del medio ambiente, elijan siempre una vida recta. La sociedad necesita de seres humanos con calidad humana que enriquezcan al mundo. En las aulas se proporciona una parte de la formación, pero es en el hogar donde se aprende la educación más importante, la cual se recibe mediante el ejemplo de los padres.
En la familia se encuentra la posibilidad de educar a seres humanos íntegros, honestos, de una pieza. Pero lograrlo significa que, en principio, los padres hagan suya esta vivencia. La familia es el principal motor para cambiar a la sociedad.


Noticia enviada por: Paulina Nieves

1 comentario:

Cecy dijo...

Niños! se me olvidó decirles que ella es una de mis amigas de reino de Chiapas... por eso me envió su artículo... saluditos!!